¡OH PADRE SANTO!
Cantad con gozo un himno triunfal
a San Jerónimo, nuestro protector.
Con ritmos nuevos un canto entonad,
que inunde el cielo de fiesta en su honor.
¡Oh Padre Santo! Mira desde el cielo
a estos tus hijos, con ojos de amor:
para los huérfanos obtén mil gracias
y para todos, tu protección.
La misma Virgen, vestida de luz,
de sus cadenas lo liberó;
y desde entonces, vencedor del mal,
fue para el pobre ayuda y protección.
¡Oh Padre Santo! Mira desde el cielo
a estos tus hijos, con ojos de amor:
para los huérfanos obtén mil gracias
y para todos, tu protección.
Y tas su muerte no lo abandonó,
pues su obra sigue y sigue su favor.
Cuantos le invocan con fe y devoción
sienten alivio y dan gloria a Dios.
¡Oh Padre Santo! Mira desde el cielo
a estos tus hijos, con ojos de amor:
para los huérfanos obtén mil gracias
y para todos, tu protección.
UN ALEGRE CANTO
Un alegre canto - elevemos todos
al Emiliani - que el divino Amor,
en el mundo - a huérfanos
y afligidos - cual padre les dio.
1.- A él, prisionero, la Madre divina
lo libra y guía, llevándolo en calma
entre enemigos, hasta tierra amiga
y salva su alma.
Un alegre canto - elevemos todos
al Emiliani - que el divino Amor,
en el mundo - a huérfanos
y afligidos - cual padre les dio.
2.- Y el fuerte soldado, de glorias pasadas
se convierte a Cristo, y deja las armas
por un amor, que nunca se acaba
y salva las almas.
Un alegre canto - elevemos todos
al Emiliani - que el divino Amor,
en el mundo - a huérfanos
y afligidos - cual padre les dio.
3.- El dócil al don, de la vida nueva
deja sus bienes, y sigue al Maestro,
acoge a los pobres, para testimoniar
con Cristo el encuentro.
Un alegre canto - elevemos todos
al Emiliani - que el divino Amor,
en el mundo - a huérfanos
y afligidos - cual padre les dio.
4.- A Ti , Padre nuestros, llenos de alegría,
aquí en la tierra, te invocan tus hijos.
y hoy te pedimos, Padre, con María
mantennos unidos.
Un alegre canto - elevemos todos
al Emiliani - que el divino Amor,
en el mundo - a huérfanos
y afligidos - cual padre les dio.
HAY UN SANTO EN EL CIELO
Hay un santo en el cielo,
gran amigo de los niños.
Este Santo fue guerrero
y la Virgen lo libró
Es San Jerónimo nuestro protector,
es San Jerónimo,
quien nos da su amor.
Es San Jerónimo nuestro protector,
es San Jerónimo,
quien nos da su amor.
Hay un santo aquí cerca,
de los huérfanos es padre
ese Santo nos anima
a querernos más que a nadie.
Es San Jerónimo nuestro protector,
es San Jerónimo,
quien nos da su amor.
Es San Jerónimo nuestro protector,
es San Jerónimo,
quien nos da su amor.
SAN JERÓNIMO, TU FE NOS DE VALOR
Hay quien vaga por las calles
sin apoyo, sin amor;
hay quien sufre y desespera,
sumergido en su dolor.
Quien se vende por dinero,
y quien compra humillación;
quien vive sin esperanza, quien muere sin ver el sol.
San Jerónimo, tu fe nos dé valor
para poner luz en su corazón.
Desde el cielo, guíanos: tu intercesión
nos hará ser manos y pies de Dios.
Hay quien duerme entre cartones;
y no tiene una ilusión.
Hay muchachos explotados
por gente sin corazón.
Niñas a las que robaron
lo mejor de su niñez;
niños que nunca jugaron,
que no saben ni leer.
San Jerónimo, tu fe nos dé valor
para poner luz en su corazón.
Desde el cielo, guíanos: tu intercesión
nos hará ser manos y pies de Dios.